Manifestaciones y transporte paralizado en las principales ciudades de Italia contra los presupuestos de Meloni

La Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), principal sindicato del país, organizó este viernes una serie de manifestaciones en las principales ciudades italianas para protestar contra los presupuestos del Gobierno de Giorgia Meloni, en el marco de una jornada de huelga de impacto general.

Italia: manifestaciones contra el proyecto de presupuesto para 2026 de Giorgia Meloni • FRANCE 24

Reclamaciones y consignas de los manifestantes

El secretario general de la CGIL, Maurizio Landini, encabezó la concentración en Florencia, donde destacó la “gran participación” de trabajadores, pensionistas, estudiantes y personas que tienen dificultades para llegar a fin de mes. Según Landini, los presupuestos presentados no responden a sus necesidades y destinan la mayor parte del gasto público al rearme, mientras la ciudadanía sufre recortes salariales y a la seguridad social.

En Roma, más de mil personas marcharon desde el centro hasta los Foros Imperiales, denunciando la “dirección equivocada” con la que el Gobierno emplea los recursos públicos. La sindicalista María Mora, también de la CGIL, criticó la falta de medidas estructurales contra la evasión fiscal y señaló que se aumentan los impuestos a trabajadores y jubilados en lugar de gravar los grandes patrimonios y las ganancias extraordinarias de las corporaciones que no pagan impuestos.

La manifestación en la capital concluyó en la Torre dei Conti, donde se rindió homenaje al obrero fallecido en el derrumbe parcial de dicho edificio medieval a principios de noviembre, un suceso que reavivó el debate sobre la seguridad laboral en Italia.

Además de las protestas, la huelga convocada para este viernes tuvo efectos dispares en el territorio nacional: paralizó parcialmente el transporte urbano en Milán y Nápoles, provocó el cierre de escuelas y cancelaciones de servicios ferroviarios en varias regiones, mientras que en Roma los servicios continuaron con normalidad, según los medios italianos.

Desde el ámbito político, la ultraderecha La Liga, partido del vicepresidente y ministro de Transportes Matteo Salvini, criticó la convocatoria de huelga e ironizó sobre la “casualidad” de que la movilización se produjera un viernes.

En sus redes sociales, La Liga escribió: “Landini hace huelga (casualmente en viernes), mientras nosotros aumentamos los sueldos a millones de trabajadores en la educación, la sanidad y el transporte”.

El ministro de Transportes visitó la central operativa de los Ferrocarriles del Estado para evaluar el impacto de la huelga y afirmó que “afortunadamente los datos son alentadores y las molestias muy limitadas”.

Por otro lado, los empleados de los diarios La Repubblica y La Stampa declararon la huelga en protesta por las negociaciones anunciadas por la familia Agnelli para vender el grupo de comunicaciones GEDI, propietario de ambos medios, al grupo Antenna.