Jordi Cruz (49 años), sobre hacer el pollo asado con coca-cola: "No es mala idea"

Los periodistas han comprobado directamente con chefs de renombre y fuentes fiables que la incorporación de una bebida de cola, como la Coca‑Cola, a la preparación del pollo asado mejora significativamente su glaseado y su textura crujiente.

En los hogares españoles, el domingo por la mañana es tradicional servir un pollo asado con su jugo y piel dorada, acompañado de patatas fritas. El plato se puede adquirir en supermercados y establecimientos especializados, pero también es frecuente prepararlo en casa, siguiendo los consejos de cocineros galardonados con estrellas Michelin, entre ellos Alberto Chicote y Jordi Cruz.

El truco de la Coca‑Cola en el pollo asado

Jordi Cruz, juez del programa “MasterChef España”, explicó en sus redes sociales que añadir una lata de Coca‑Cola a la marinada del pollo no es una idea casual, sino una técnica que aprovecha los azúcares de la bebida para crear un glaseado brillante y lograr una piel extremadamente crujiente. “Sé que muchos tienen una idea extraña de la Coca‑Cola, pero en este caso ayuda a que el pollo quede muy ‘crunchy’”, comentó en el vídeo.

El chef del restaurante ABaC, también citado como referencia en la noticia, corrobora que los azúcares presentes en la cola favorecen la caramelización del pollo, aportando un sabor dulce y una textura jugosa por dentro.

Este no es el primer caso de uso de bebidas alcohólicas o refrescos en la cocina del pollo asado. Jordi Roca, del emblemático El Celler de Can Roca, compartió en sus redes sociales una receta similar que incorpora una lata de cerveza, subrayando la versatilidad de estas bebidas para realzar el sabor de la carne.

Además de la bebida de cola, la selección de especias juega un papel esencial para conseguir un toque rústico y fresco. Los ingredientes recomendados son:

• Romero: aporta un aroma tradicional y combina perfectamente con la dulzura del glaseado.
• Limón: aporta acidez que evita que el pollo se seque, manteniéndolo jugoso.
• Pimentón dulce: aporta color y un ligero sabor ahumado, muy valorado por chefs especializados en carnes.

Siguiendo estos consejos de chefs con estrellas Michelin, cualquier aficionado puede preparar en casa un pollo asado con una piel crujiente y un sabor equilibrado entre dulce, ácido y aromático, convirtiendo la comida del domingo en una experiencia gastronómica digna de los mejores restaurantes.